Los azules suman dos victorias y un empate en sus últimos tres cotejos
El conjunto de Millonarios parece estar tomando un segundo aire en la primera división colombiana. El motivo, haber sumado siete puntos en sus últimas tres presentaciones, hecho que le brinda nuevamente certeras esperanzas a los dirigidos por el técnico Richard Páez, de poder quedar entre los ocho primeros puestos que brindan un cupo a los cuadrangulares finales del torneo cafetero.
Su más reciente victoria lograda como visitantes en la jornada del fin de semana, en el estadio Doce de Octubre, frente al Cortuluá, fue bastante sufrida, la cual tuvo como protagonista al ariete Yovanny Arrechea, cuyo gol en los minutos finales, le dio la oportunidad al “millos” de ganar dos goles por uno. Resultado lleva al optimismo al cuadro bogotano, sobretodo luego de sumar en tres fechas consecutivas, racha que consiguen por primera vez en el año.
“Millonarios estaba necesitado de victorias, hemos estado comprometidos en la tabla por los malos resultados. Fue una buena semana y un triunfo importante fuera de casa ante Cortuluá”, dice referente a la victoria dominical. “El equipo ha venido levantando su nivel en base al convencimiento de que podemos hacerlo. También cambiamos de estilo de juego, jugamos más atrevidos y somos más ofensivos. Tenemos mucha fe en lograr nuestros objetivos”, comenta muy optimista.
APUESTA POR EL BUEN JUEGO
Desde su llegada a suelo bogotano, las cosas no han sido sencillas para el estratega merideño, quien ha tenido que lidiar, no sólo con la presión de generar un cambio en el club a corto plazo, sino también con la falta de resultados que han tenido, suerte que pareciera cambiarle almenos en estos últimos encuentros de liga.
“Todo en la vida es un ciclo. El equipo viene de varios años en caos, inmersos en problemas financieros y malos resultados deportivos. Estamos realizando cambios y esto lleva tiempo. El Millonarios de hoy apuesta por el buen juego y manejo de pelota. Pienso que hemos venido jugando bien, lamentablemente perdimos varios partidos proponiendo un buen fútbol”, sentencia Richard, satisfecho por la actitud que ha presentado su club hasta ahora.
UN CALENDARIO ALENTADOR
Si algo ha demostrado el merideño en su carrera como director técnico, es mantener siempre el optimismo y la fe en que las cosas mejoren. Los últimos días han sido importantes a nivel motivacional para el club. A falta de siete cotejos para culminar la fase regular, el “ballet azul” mantiene serias opciones de clasificarse. Para Richard Páez el calendario se presenta alentador, y sus opciones de colarse entre los ocho primeros no suena descabellada, como sí parecía serlo hace dos semanas atrás.
“Tenemos claras opciones de ir a los cuadrangulares finales. Nos restan siete vitales duelos, cuatro de estos juegos son ante rivales directos que están cerca de nosotros en la tabla de posiciones. Ya hemos jugado los compromisos más complicados. Seguiremos comprometidos con nuestros objetivos, trabajando con la confianza puesta en Dios, en nuestro trabajo y jugadores para lograr meternos en la etapa final”, finaliza el estratega, quien busca la ansiada clasificación de su club, algo que no ocurre desde el año 2007.
El conjunto de Millonarios parece estar tomando un segundo aire en la primera división colombiana. El motivo, haber sumado siete puntos en sus últimas tres presentaciones, hecho que le brinda nuevamente certeras esperanzas a los dirigidos por el técnico Richard Páez, de poder quedar entre los ocho primeros puestos que brindan un cupo a los cuadrangulares finales del torneo cafetero.
Su más reciente victoria lograda como visitantes en la jornada del fin de semana, en el estadio Doce de Octubre, frente al Cortuluá, fue bastante sufrida, la cual tuvo como protagonista al ariete Yovanny Arrechea, cuyo gol en los minutos finales, le dio la oportunidad al “millos” de ganar dos goles por uno. Resultado lleva al optimismo al cuadro bogotano, sobretodo luego de sumar en tres fechas consecutivas, racha que consiguen por primera vez en el año.
“Millonarios estaba necesitado de victorias, hemos estado comprometidos en la tabla por los malos resultados. Fue una buena semana y un triunfo importante fuera de casa ante Cortuluá”, dice referente a la victoria dominical. “El equipo ha venido levantando su nivel en base al convencimiento de que podemos hacerlo. También cambiamos de estilo de juego, jugamos más atrevidos y somos más ofensivos. Tenemos mucha fe en lograr nuestros objetivos”, comenta muy optimista.
APUESTA POR EL BUEN JUEGO
Desde su llegada a suelo bogotano, las cosas no han sido sencillas para el estratega merideño, quien ha tenido que lidiar, no sólo con la presión de generar un cambio en el club a corto plazo, sino también con la falta de resultados que han tenido, suerte que pareciera cambiarle almenos en estos últimos encuentros de liga.
“Todo en la vida es un ciclo. El equipo viene de varios años en caos, inmersos en problemas financieros y malos resultados deportivos. Estamos realizando cambios y esto lleva tiempo. El Millonarios de hoy apuesta por el buen juego y manejo de pelota. Pienso que hemos venido jugando bien, lamentablemente perdimos varios partidos proponiendo un buen fútbol”, sentencia Richard, satisfecho por la actitud que ha presentado su club hasta ahora.
UN CALENDARIO ALENTADOR
Si algo ha demostrado el merideño en su carrera como director técnico, es mantener siempre el optimismo y la fe en que las cosas mejoren. Los últimos días han sido importantes a nivel motivacional para el club. A falta de siete cotejos para culminar la fase regular, el “ballet azul” mantiene serias opciones de clasificarse. Para Richard Páez el calendario se presenta alentador, y sus opciones de colarse entre los ocho primeros no suena descabellada, como sí parecía serlo hace dos semanas atrás.
“Tenemos claras opciones de ir a los cuadrangulares finales. Nos restan siete vitales duelos, cuatro de estos juegos son ante rivales directos que están cerca de nosotros en la tabla de posiciones. Ya hemos jugado los compromisos más complicados. Seguiremos comprometidos con nuestros objetivos, trabajando con la confianza puesta en Dios, en nuestro trabajo y jugadores para lograr meternos en la etapa final”, finaliza el estratega, quien busca la ansiada clasificación de su club, algo que no ocurre desde el año 2007.
